Después de estar todo el verano sin pisar el rastro, y con un mono de hacerlo quepaqué te cuento, por fin regresé este domingo, más que nada por recuperar mis paseos dominicales...., aunque de camino me paré en el escaparate de una de las tiendas de Reto (o uno parecido) y me enamoré de una vitrina art decó -que lleva escrito mi nombre, sí, sí, en un lateral... junto al precio- y a la que he encontrado una estupenda ubicación en un apartamento que tengo que amueblar (cuando vaya a por ella la habrán vendido, me lo estoy temiendo... y me cogeré un cabreo....)
Tonta de mí sólo llevaba 16 euros en el bolsillo, para "por si acaso", pensando en que no iba a ver nada interesante. Y como siempre pasa... no hacía mas que ver cosas o imaginarme todas las cosas, de cualquier puesto, por cutre que fuera éste, tuneadas. A lo mejor es que como hacía ya tiempo que no iba, por eso me gustaba todo... O igual es que me he vuelto más cutre que antes (si es que eso es posible)
El caso es que llevo tiempo intentando hacerme la encontradiza con un espejo sol. Si, ya se que al estar de moda los hay en miles de sitios, pero yo quería, como siempre, encontrar mi tesoro personal.
Y es que son tan monos....
en mi espacio vital |
El caso es que algo con forma de sol encontré y encima me gustó porque era diferente, pero claro, no me llegaba, así que tuve que poner cara de buena (que eso siempre da resultado) y regatear. Os presento a mi reloj sol (ahora es cuando empiezo a oir... bauhhh, qué feo.....y tanta parafernalia "pa esto"!)
Le han cambiado la maquinaria original por una moderna a pilas, que todavía no se si funciona o no, pero de todas maneras, es fácil de sustituir. Lo único es que no tengo ni idea de dónde colocarlo... ya iré probando.
Lo mejor es que el dinero me dió más de sí y con una mínima aportación de lo que le quedaba al churri después de desayunar, conseguimos un peluche para hacer una cosa (que os contaré si sale como espero) y una mesa años sesenta (muy parecida una que había en casa de mi padre en la playa cuando eramos peques), chulísima y genial conservada, que para una entrada -lo estoy viendo- quedará genial.
Y me quedé con las ganas de llevarme un ventilador, que espero poder volver a ver el domingo que viene....Era igualito, igualito a este
Etxekodeco |
Ayyyy, si con razón me gusta tanto cuando me dicen
Hey... chamarilera!
Soy un enamorado, apasionado diría mejor, de los espejos sol: en mi casa tengo 2 y no veo el día de comprar un tercero, y un cuarto... En fin, que me encanta también ese reloj sol encontrado en el rastro. Al lado de un espejo sol quedaría genial. A por él...
ResponderEliminarUn abrazo,
Fran
Como echo de menos el rastro de los domingos de Zaragoza. KK de crisis que te aleja de los sitios donde estas a gusto!!! Sigue chafardeando y enseñandonos los tesoros que encuentras.
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