martes, 27 de marzo de 2012

Como decorar un pequeño apartamento y no arruinarse en el intento (y III)


Terminamos con el "ala este". El baño y la cocina son nuevos. No fueron cosa mía, aunque deberían haberlo sido y así me habría ahorrado tener que darles un pequeño retoque para mejorarlos. Esto de tener que rehacer lo que es nuevo me fastidia muchísimo, pero de todo se aprende -y sirve de escarmiento- y la próxima vez seguro que queda mucho mejor. 




El baño es pequeño y alargado y ha mejorado muchísimo con esta puerta corredera de cristal que compré en Leroy Merlin con un descuento estupendo.

Así lo dejaron, bien alicatao de suelo a techo, baldosas que no falten, pero de lo demás.... escasito, escasito. [Y el calentador... que se vea bien]



Así lo hemos apañado;



En la ducha, un nuevo rociador, nada que ver con el telefonillo enano que habían puesto. Los hay de todos los precios (este es de los baratos del Brico) pero es un pequeño cambio que merece mucho la pena. 
Las cortinas son, como de costumbre, de Primark. Están genial de precio y tienen un montón de modelos (a mi siempre me encaja uno u otro)





El horrible lavabo lo hemos cambiado por una encimera de cocina de Ikea sobre la que hemos puesto un lavabo sencillo, pero más majete. Debajo una estantería que en principio iba para la zona de la cocina, pero en un "paraflús" cojí la caladora, la dejé en la mitad y ahora encaja perfectamente de bajolavabo. De toallero, un riel Bygel del que cuelga un recipiente de plástico, del mismo nombre, que hemos utilizado para el rollo de papel higiénico (todo con tal de no hacer más agujeros en las baldosas!!!!)
El espejo está en un lateral, porque con él intenté darle -sin éxito- una oportunidad al horrible lavabo y después de hacer los agujeros, ya no lo muevo. De todas formas, se puede poner uno de la forma convencional.
El armario marrón fue una incorporación de última hora y es que de 80 € los habían dejado en 19€ porque lo descatalogaban en Ikea y era una oferta que no podía dejar escapar.

Por último entramos en la cocina-salón-comedor, que con el espacio tan reducido, teniendo que acoplar los muebles que ya tenía e improvisar el resto, no ha quedado mal del todo.

Con la cocina me pillé un rebote de los buenos que como ya he olvidado, prefiero no recordar, pero la plantaron directamente sobre una pared que ni estaba lisa, ni estucada (que es como le decimos al gotelé por estas tierras)... tanta baldosa en el baño y aquí ninguna????? Finalmente y para simplificar, alisaron la pared y la pintamos con la pintura que utilizaron para rehabilitar la fachada de la casa protegiendo la zona de la vitro con un panel.




Los armarios de arriba los cambié de sitio para poder acceder mejor y poder poner las baldas metálicas.





Abrimos el plano y vemos que la puerta ahora abre hacia el otro lado. Milagroooooo!!!!!! El albañil dijo que era ¡¡¡¡¡¡¡imposible!!!!!!!. En fin. [Ya lo dice Adidas con buen criterio... impossible is nothing y menos para nosotros (Churri, Javi y yo)]



La mesa roja también está descatalogada ya y la compré por poco más de 20€. Sólo son tres tablas pero más vale llamar a pulgarcito para montarla, porque mira que yo tengo las manos pequeñas y hasta que atiné a enroscar los tornillos, sudé lo mío. 



El sofá lo tenía guardado de las súper ofertas de aniversario de Ikea, es de cuero blanco y me costó 99 €. La mesita es de La Quarta, necesitaba algo pequeñito y ésta me pareció muy mona, 35€. Pide a gritos una alfombra y cojines, la verdad, pero que los ponga quien venga.


La lámpara (15€) es de Alcampo, cortinas (15€) de Ikea, sillón (16€) y cojín (no me acuerdo €) de oportunidades de Ikea.


Tengo que reconocer que la mesa es un poco grande para ese espacio, pero la encontré en el rastro por 15€!!!, y no es fácil encontrar mesas redondas (y menos que estén bien de precio). Esta es la Docksta de Ikea (ni idea cómo llegaría a las manos del señor al que la compré... hay cosas que mejor no saber). Las sillas rojas las tenía desde hacía mucho (12,50€) y la transparente (19€) es la compañera de la que hay en la habitación.


Aquí la tele, con plásticos y todo, para que se vea que es nueva (por eso hay cosas que llevan todavía la pegatina) otro chollazo del aniversario de Hipercor [Atentos a las ofertas aniversario porque siempre hay cosas que merecen mucho la pena] sobre la otra estantería que sobró de la habitación. Esta no lleva patas pero la hemos colocado volada.



Y esto es todo amigos! 

Como no me gusta "dar consejos" [por eso de... "consejos vendo y para mí no tengo"], emplearé esta internáutica expresión... "Tips para una decoración low cost" (que viene a ser lo mismo, pero en moderno)

- Antes de lanzarte a hacer nada define bien lo que quieres hacer. Empápate de revistas, blogs, casas de amigos, conocidos, hoteles (la cadena "Room mate" hace cosas chulísimas), tiendas (un paseo por Puerta del Ángel en Barcelona, de tienda en tienda, es de lo más inspirador). En cualquier parte puedes ver algo que e llame la atención (yo me inspiro un montón en el ascensor que baja al parking en Ikea)
- Una vez que has encontrado el estilo que te gusta, busca entre tus cosas, las de la familia y allegados, qué puedes apañar. Lo que no puedas encajar y esté en buen estado, intenta venderlo (y eso que te llevas puesto!)
- Ve a la caza y captura del chollo, no solo en rebajas. Busca en todas partes. Léete los catálogos de todos los establecimientos (que suelen estar disponibles en sus webs en formato pdf). Ve con los ojos bien abiertos por la calle. Entra, mira y pregunta en TODAS las tiendas, hasta en las que crees que no entran dentro de tu presupuesto, porque a lo mejor también tienen alguna oferta buena y, en el peor de los casos, cogerás ideas.
- Guarda todos los tickets y lo que no utilices lo devuelves (que no te de pereza ir a cambiarlo), que tres eurillos de unos tornillos, cuatro de un pincel y otro poco más de alguna otra cosa y ya tienes para una silla nueva! (y menos cachivaches rondando por casa)

En resumen, que si no quieres gastar dinero, tendrás que gastar suela de zapato (y ahora que comienza la operación bikini, lo que te ahorras en gimnasio, lo tienes para otras cosas!)

No puedo despedirme de este apartamento sin dar las gracias, una vez más, a Javi y a mi churri, sin cuya ayuda nada de esto sería posible y a los que ya tengo embarcados en un nuevo proyecto del que, como siempre, os mantendré informados.

martes, 20 de marzo de 2012

Como decorar un pequeño apartamento y no arruinarse en el intento (II)

Estamos decorando este apartamento


Ya hemos visto la hab. 2 y hoy entramos en la hab. 1, que es la principal (aunque ya la enseñé bastante aquí, pero hoy la analizamos a fondo). De como la pensé inicialmente a como es ahora, ha dado unas cuántas vueltas.

Los tonos a utilizar (blanco, gris y negro) vinieron de la mano de éste espejo que compré en el Corte Inglés cuyo precio original era 140€ (con razón no lo vendieron) y compré por 29 (os pongo la foto, que me da mucho gusto ver estas cosas) un día que pasaba por allí y me llamó la atención. No es especialmente bonito, pero lo veo decorativo y me gusta porque es diferente.




Después de decidir los colores y el estilo empecé a rebuscar por lo que tenía a ver qué encajaba con qué. El colchón y el canapé los tenía sin estrenar desde hacía tiempo. Los compré en oportunidades de Ikea realmente baratos, al tiempo, al ir a comprar las patas, encontré estas ruedas tan chulas de súper oferta porque las estaban decatalogando. La colcha gris la compré en Makro, en el rincón de últimas unidades, un día que fuimos a hacer compras navideñas, me costó 14€. En total me salió por poco más de 100 €


Con las mesillas que quería poner inicialmente (que son como unas expedit en pequeño que compré a 5 euros cuando el aniversario de Ikea en mi ciudad) mi visualización falló porque eran mucho más grandes de lo que pensaba y quedaban fatal, así que las reubiqué convertidas en sendos bancos, una en el salón para la tele y otra en la habitación. Las mesillas que puse ya las conocéis de sobra... Como lámparas la imitación "ikeana" de las lámparas Tolomeo, cuyas últimas unidades vendían por 5€. 
La idea del cabecero fue pura improvisación. Primero pensé en poner un aplique de una forma determinada... y compré en el rastrillo otro aplique que no tenía nada que ver con lo que había pensado. Luego deseché la idea de poner luz ("dónde vas con tanta lámpara junta!") y pensé en pintar unas rayas grises que imitaran al cabecero, pero me dio una pereza horrorosa. Algo hacía falta y de pronto le dije a Javi "y si ponemos unos redoncheles negros que tengo guardados?"... "Ah, pues vale, tráelos a ver". Son unos paneles imantados de Ikea (también descatalogados, 4,90€ en oportunidades), quedan bien monos y sirven para dejarse notas!!! 






Como, afortunadamente, mi stock de armarios de melamina se había agotado, había que pensar en otra opción y de siempre me había gustado el armario Konsmo de Ikea (me parece que le han subido algo el precio, me suena que me costó algo más barato), es muy amplio y por dentro es muy chulo. 
También tenía claro que quería una cómoda con cajones, que además fuera el foco de atención de la habitación (igual que las letras de la otra habitación) de ahí que la pintara en ese amarillo tan intenso. Encima, y a modo de tocador, iba el espejo que os he enseñado antes, pero no acababa de quedar bien, así que en su lugar pusimos estas baldas que también tenía (aunque así tan "pelao" se ve un poco soso; hay que imaginarlo con libros, algún recuerdo personal...)
Para terminar con el almacenamiento aprovechando el recoveco de la pared, unos zapateros Trones, con el de arriba ligeramente separado para utilizarlo como vacía bolsillos (idea de Javi -que por cierto, no es mi churri, sino el de una amiga, pero junto a mi churri, son mi gran ayuda y ya no sabría vivir sin ellos)






Finalmente, con el espejo, el desechado proyecto mesilla reconvertido en banco (también con patas) y los cojines que compré en las rebajas, quedó este rincón que resulta la mar de práctico porque además te puedes ver de cuerpo entero y completa la zona de vestidor.




Aquí, además de ver al churri haciendo el canelo, podéis ver que he pintado las puertas de blanco y las manillas de negro, y el cambio ha sido impresionante.



Si fuera para mí, hubiera puesto esta alfombra (probablemente encima de otra alfombra negra que abarcara toda la superficie de la cama)


Ya veis que la cuestión es ir dándole vueltas a las cosas hasta que nos encajan donde queremos. 
En la siguiente entrega vemos el resto de la casa.

viernes, 16 de marzo de 2012

Como decorar un pequeño apartamento y no arruinarse en el intento (I)

Hoy, por fin, empiezo la turné por el apartamento del que tanto os he hablado. Para que no me quede una entrada eterna, os lo cuento por "fascículos"

Empiezo por poneros un pequeño (e informal) plano de la casa para que os hagáis mejor a la idea.

Hasta hace un par de años, se utilizó como oficina, la habitación 1 y 2 eran un espacio diáfano, no había ducha y el trozo que ahora la ocupa era terraza y tampoco había cocina. Se conservó el suelo, que  no estaba mal (a pesar del coñazo que me dió el albañil para que lo cambiara) y sacamos dos habitaciones, aunque la habitación 2 me resistí a tabicarla, porque de esta manera entra una luz a toda la casa que es una maravilla. Es toda exterior, pero al ser alargada, un poco complicada de distribuir.

La intención es hacer, como dice Fran de Etxekodeco -experto en denominaciones "decoriles"- un "home staging" [en cristiano; contratar decoradores para poner la casa bonita y poder venderla o alquilarla "mejormente" -tal y como está el patio, nos quedaríamos con "poder alquilarla", a secas-] pero en mi caso la estilista (y la currela), es la que suscribe y los medios económicos reducidos, por lo que he hecho malabares para adaptar las cosas que tenía y las súper gangas que he podido conseguir de aquí y allá y que el resultado sea aceptable.

Y después de esta extensa introducción... a lo que vamos, que se nos va el vino en catas. Os pongo las fotos del antes y el después, que es lo que gusta. Hay que tener en cuenta que falta el "atrezzo", que la verdad hace mucho, pero eso lo tiene que poner quien vaya a vivir allí.

Entramos


Como os decía, era una pena anular toda esta luz poniendo un tabique, pero como la intención era sacar una segunda habitación, algo había que poner para separar y crear un poco de intimidad sin cortar el paso de la luz y tras mucho pensar (y porque me inspiró un apartamento sueco, todo hay que decirlo) unas estanterías Expedit me dieron la solución (aproveché un 2x1 que había en ese momento). Aportan, además, un espacio de almacenamiento estupendo y viene genial para dejar las cosas (llaves y demás) cuando entras a casa.




Aunque el espacio es pequeño me he atrevido con el negro, al ser el resto de paredes blancas, el suelo claro y haber tanta luz, me lo podía permitir y la verdad es que este rincón ha quedado tal cual lo había imaginado (y me encanta!)



Aquí me llevé uno de los grandes chascos. El armario lo tenía de una súper oferta y estaba totalmente convencida de que era blanco (de hecho por dentro, es blanco!), y cuando lo ví después de que lo montara el churri, casi me da algo al ver el color. La intención era que este espacio fuera blanco y negro. Pensé en tunearlo, pero finalmente desití, sólo le cambié los tiradores -los que traía eran de espanto- por estos negros sencillos de Ikea que ayudan a integrarlo con todo lo demás y para que todo lo demás quedara integrado con el armario, puse la alfombra de fibras naturales y el estor de separación en los mismos tonos (así da todavía más intimidad si hay alguien acostado)



Dónde lo he comprado todo y cuánto ha costado:


1: Estanterías EXPEDIT de Ikea: dos como ésta y una como ésta, había promoción 2*1 (la otra grande la pusimos en casa de churrimadre) y 6 patas Capita [al principio no llevaba patas, pero como la altura me lo permitía, las puse. Es mucho más práctico porque así no se estropea el mueble al fregar el suelo. Mi recomendación es ponerlas] Total: unos 50 € (si no está de oferta unos 82€)

2. Papel pintado negro de espiga (tiene un relieve que es una chulada) de Leroy Merlin, 2 rollos (uno me sobró casi entero) van a 12, 90€, pero lo compré de oferta a 8 € el rollo.

3. Estor de bambú comprado en la tienda Casa. Su precio habitual es de algo más de 6 euros, pero lo compré de súper liquidación por 2€

4. Lámpara de papel, que podéis encontrar en cualquier parte (Ikea, Leroy, en un chino). Ésta es de AKI y me costó 1 € de oferta.

5. Estor Isdans de Ikea: 14,99€ (este lo compré a su precio)

6. La cama, que no os puedo decir el modelo, la compré en las oportunidades de Ikea y todo me costó 99€. Como no encontraba una colcha negra que me convenciese (principalmente por precio) compré dos Polarvide (2,99€) en Ikea y las cosí (el remate es de ondas y queda muy mono). Los cojines, también de Ikea, los compré en oportunidades al 50% de descuento.

7. Alfombra de fibras vegetales de la colección de verano de Ikea del año pasado. La compré a final de temporada y me costó 5€.

8. El cartel, viene de la calle (os lo conté aquí) y era exactamente el punto de atención en color blanco que estaba buscando 







El escritorio/estantería es de Hipercor (24,90€), la silla de la Quarta (19€, aunque su precio original es de 79€) y el cojín (2€) de Ikea. Armario (unos 50€) de Brico Depot con tiradores Sätta (1,99€/6 uds) de Ikea. Perchero 19€ de Casa  (el bolso es mío y.... también lo compré en las rebajas!!!)

Y sigo en la siguiente, para no agotarnos con tanto detalle (de todas maneras, si queréis saber algo que me haya dejado en el tintero -que no se me ocurre qué pueda ser- no dudéis en preguntar)

Feliz finde!






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