Este es nuestro pueblo visto desde el pequeño campo de almendros que ha visto pasar a varias generaciones de la familia paterna del churri. De por sí, es tierra de secano, pero con esta sequía está todo tan árido que parece que le han quitado color a las fotos... qué pena! Aunque me parece un milagro que estos pobres almendros asilvestrados que llevan más de una década sin podar, sigan dando fruto.
Y aquí os enseño lo que está siendo nuestro gran proyecto, que es poner de nuevo en pie una vieja casa de adobe (de la que he hablado muchas veces, pero que todavía no he enseñado aquí) y que compramos en ruinas. Aquí vemos la parte trasera de la casa que es de tapial y está bastante bien conservado. En esta zona, en el valle del Jalón, fue numerosa la población mudéjar y morisca y por las características constructivas de nuestra casa, creemos que data de entonces.
Tenemos un largo camino por delante, que todavía se está haciendo más largo por la dichosa crisis, pero mucha ilusión de poder conservar y recuperar lo que nosotros consideramos parte de nuestro patrimonio cultural. Aunque los viejos del lugar nos miran con escepticismo y mucha socarronería... "Maaaahhhh, pues no tienen obra ni nada...". Razón tienen, la verdad, pero en ello estamos. Ya os lo iré enseñando.